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Más que un videoclip, “Fénix”
es la última aventura del músico penquista Mathias Encina, quien decidió
registrar su última composición a los pies de la Cordillera, realizando
la compleja hazaña de montar un piano en las faldas del Volcán Antuco.
Un rodaje que duró dos días y que
implicó el traslado a pulso de un instrumento de 220 kilos por rocas
volcánicas, en una logística que implicó a 12 personas.
“Es un lugar complejo de abordar.
Sabíamos que era a solo metros de donde ocurrió la tragedia de Antuco
años atrás, así que decidimos hacer el acercamiento por tramos. El suelo
era muy complejo, de roca volcánica, y las temperaturas casi siempre
inferiores a cero, así que decidimos asesorarnos con personas locales que
conocieran la zona en profundidad, y así encontrar los mejores accesos y
mitigar los posibles riesgos de seguridad”, comenta Mathias.
Mathias Encina propone la
revalidación de uno de los géneros más antiguos: la música barroca,
a la que agrega nuevos elementos que denomina "fantasía
contemporánea". Se trata de sonidos que si bien siempre están
presentes, son poco convencionales para el público chileno y que
hasta ahora se reservaban para escenarios muy exclusivos y de nicho.
La apuesta musical de Mathias es
-con cada una de sus canciones- conectar emociones y atmósferas
oníricas a los diferentes paisajes de la geografía chilena, recorriendo
de norte a sur los rincones más inaccesibles.
Esto ha llevado al músico y
productor a desarrollar su más reciente proyecto, "La Ruta del
Piano", un recorrido por Chile en el que
registra sesiones en vivo en plena naturaleza, siempre con un
piano a cuestas y un complejo equipo de producción audiovisual. Su paso
por diferentes lugares como el Lago de todos los santos, Chiloé y
Coliumo, están registrados y disponibles en su Canal de Youtube.
Mathias se presentará en vivo en
Santiago a finales de julio en dos conciertos, en el Teatro de la
Corporación Cultural de Carabineros y un show íntimo en Chile Pianos.
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